(GRADO NOVENO)
Influencia de la Lengua en el proceso de la Comunicación
Entendida la Lengua como ¨sistema de comunicación y expresión verbal de un pueblo o nación, o común a varios¨[1], siendo, ya de por sí, vital y fundamental en el proceso comunicativo humano, el cual sería imposible sin ésta herramienta y más específicamente, en el proceso educativo, ya que es desde éste ámbito, el motor que desarrolla y enriquece la comunicación, presentándose ésta, desde distintos aspectos: en el uso común del sistema lingüístico (lenguaje popular) o desde la ciencia y/o el Arte y demás saberes humanos.
Al estar la Lengua plenamente definida, siendo vehículo de la cultura y proveniente de otros sistemas lingüísticos, de quienes se ha nutrido o ha influenciado, en un mayor o menor grado, ésta se va modificando (enriqueciendo) en el uso diario de la misma, permitiendo una ampliación de palabras y conceptos, mejorando notoriamente el proceso comunicativo, que es un proceso de comprensión y entendimiento de unos signos predeterminados (vocablos), favoreciendo la socialización de los humanos.
No pretende la lengua unificar comportamientos y pensamientos, sino, en su transmisión, presentar distintas alternativas del uso de los distintos vocablos, haciéndola más y más rica en su significación, ampliando de por sí, el desarrollo cultural de un pueblo o una nación.
Y en este orden de ideas, vemos como unas lenguas (idiomas) son más ricas que otras, incidiendo notoriamente en la capacidad de abstracción y pensamiento de sus hablantes, ya que existe una influencia directa de la lengua y el lenguaje con el pensamiento: a mayor variedad y riqueza expresiva, mayor capacidad comunicativa y comprensiva, y por ende, una mayor capacidad imaginativa, reflejada directamente en el desarrollo artístico y cultural de los pueblos.
Actualmente, desafortunadamente, existe una tendencia a reducir el campo expresivo de la palabra, a imágenes o signos que pretenden su reemplazo, perdiendo el gran significado de las palabras y su campo expresivo, argumentando un ahorro de espacio por ¨ir directamente al asunto¨, sin más explicación, que lo que la imagen dicha refiera. Es el caso de los ¨emoticones¨ o de otros signos gráficos, de tanto uso hoy en día, especialmente en las comunicaciones de formato electrónico o ¨mails¨, cuyo uso va en aumento, perjudicando notoriamente la significación y capacidad expresiva e imaginativa, a la que conlleva el uso de la palabra. Y mucho más, cuando esta palabra es incitadora de evocaciones vividas o por vivir, sentidas plenamente, haciendo parte fundamental de nuestro ser y pensar. Una palabra que ata, construye, siembra esperanzas y regocija; una palabra que hace parte de nuestra intimidad y que la esbozamos en aquellos momentos tan especiales, esperando significarlos mediante ella.
Dice Vicente Verdú [2] , escritor y filósofo español, ¨ Hablar, dialogar, conversar. Casi cualquier cosa parece capaz de resolverse mediante la palabra. Pero se trata de una palabra tan promiscua como susceptible de suscitar un variado sabor. Ésta es la riqueza del lenguaje, el don de la polisemia.¨
De ahí, la necesidad de promover mayormente, la utilización ampliada de la palabra (oral o escrita), para el fortalecimiento del proceso comunicativo, haciendo de éste, un encuentro maravilloso de personas que tienen tantas cosas para decirse, expresadas de mil y una formas posibles, para que todo quede dicho, pero siempre pudiendo decir más.
Es el reto a asumir en contra de una economía, ya no únicamente de recursos renovables o no, sino de aquello que nos significa, que nos identifica, como es nuestra lengua y su baluarte más precioso: la palabra, amenazada de muerte hoy en día por la tecnología, queriéndola reemplazar por aquellas figuras desteñidas y alejadas de nuestro ser, casi mudas, frías e impenetrables a nuestro ser: ¨ ¿Empobrecimiento del idioma? ¿A quién le importa? Cualquiera de las aprehensiones que provoca el alud de faltas ortográficas, el decir sincopado o los errores de dicción forman parte del mismo fenómeno de destrucción. El fenómeno que elimina del habla su prosapia, del concepto su irisación y de la emoción numerosas especies vivas.¨ [3]
Nuestro primer contacto con el mundo que hoy disfrutamos, fue a través de nuestra madre, quien con leves susurros de amor y alegría, arrullaba nuestros miedos e incomprensiones, y, conjuntamente, esas caricias tan especiales iban acompañadas siempre de esas palabras maravillosas que nos tranquilizaban y más nos hacían depender de ella. Como también hoy, dependemos de las palabras para comunicarnos con nuestros semejantes y en la medida que nuestro vocablo sea más amplio, de esa forma, más amplia nuestra forma de expresar y expresarles a aquellos, lo importante que es el cultivo de las palabras (lengua), ya que éstas nos comunican y relacionan directamente con la fuente nutricia de nuestro ser: la naturaleza (Dios).
Es el sistema educativo el que ha de fomentar, a través de ¨buenos maestros de la palabra¨, su uso, enfatizando en la importancia de la misma y reconociendo que los grandes escritores, grandes comunicadores, han hecho de ella, su arte predilecto, y el nuestro, no sin esfuerzo alguno, ni en contravía de las corrientes propias de las épocas por ellos vividas, como lo expresa nuestro Nobel insigne, Gabriel García Márquez: ¨ Para sustentar esa alegre suposición no tengo más fundamento que la experiencia difícil y empecinada de haber aprendido el oficio de escritor contra un medio adverso, y no sólo al margen de la educación formal sino contra ella, pero a partir de dos condiciones sin alternativas: una aptitud bien definida y una vocación arrasadora. Nada me complacería más si esa aventura solitaria pudiera tener alguna utilidad no sólo para el aprendizaje de este oficio de las letras, sino para el de todos los oficios de las artes.¨ [4]
De ahí, que el docente, actor principal de este proceso comunicativo y evolutivo, ha de exhortar a vivir en la ¨iluminación de la existencia¨ ( Nietzsche en ¨Schopenhauer como Educador¨), y permitirle al discente, el gozo y alegría, que un buen uso de la palabra, nos traería, descubriendo vocaciones en los estudiantes y estimulándolas, no sólo con el único fin de formar escritores, sino de seres que encuentren en la vida, su forma expresiva altamente gratificante y significante, cumpliendo así con uno de los deseos más fervientes y anhelados de los seres humanos: el encuentro de la felicidad.
Es la comunicación, el proceso que nos permitirá descubrir (y descubrirnos) esos talentos ocultos (y que se ocultan), permitiendo el encuentro con ellos mismos. O, como continúa diciendo Gabriel García Márquez, ¨ Por eso los que tienen vocaciones escondidas asumen actitudes engañosas para salirse con la suya. Hay los que no rinden en la escuela porque no les gusta lo que estudian, y sin embargo podrían descollar en lo que les gusta si alguien los ayudara. Pero también puede darse que obtengan buenas calificaciones, no porque les guste la escuela, sino para que sus padres y sus maestros no los obliguen a abandonar el juguete favorito que llevan escondido en el corazón. También es cierto el drama de los que tienen que sentarse en el piano durante los recreos, sin aptitudes ni vocación, sólo por imposición de sus padres. Un buen maestro de música, escandalizado con la impiedad del método, dijo que el piano hay que tenerlo en la casa, pero no para que los niños lo estudien a la fuerza, sino para que jueguen con él.¨ [5]
Por eso, reitero, el papel del educador es fundamental, tanto en el descubrimiento, como apoyo e impulso, a que los estudiantes se encuentren inmersos en un mundo que les es favorable a sus intereses y gustos, y, esto se logra mediante el buen uso y desempeño de una buena comunicación, favorecida por una lengua tan rica y de significación tan variada (polisemia), que lo que menos podemos hacer, es impulsarla, desarrollarla, apropiarnos de ella, defenderla y morir por ella.
(Pedro F. Cuartas G.)
Amigo Estudiante: Leído el texto anterior, favor opinar sobre lo siguiente:
· La economía o ahorro de las palabras, en el lenguaje actual.
· El papel del estudiante en la mejora del proceso comunicativo, a través de la educación.
· ¿El Libro…, ese juguete fantástico, escondido u oculto o ajeno a nuestros intereses?
· ¿Cómo se enriquece (se ha enriquecido) nuestra lengua?
10 comentarios:
es una lectura muy emosionate e interesante ya que nos da a conocer cosas muy interesantes.T.K.M. ESTEFANIA Y TIFANY 9C
pedro eres muy especial este articulo esta super mejor que el otro gracias te amo
HOLA PEDRO.
este articulo me parecio emosionante y mas interesante que el otro
hola profe como estas espero que super bn, profe me parecio muy interesante la lectura, emosionante y vacana, estas son las lecturas buenas, profe yo lo dejo cuidese chao
hola pedro me parecio muy interesante la lectura, tambien emosionante cuidese chao
danilo garcia 9-A
hola...profe para mi es un tema muy interesante porque nos sirve a todos los seres humanos para tener un lenguaje corporal mucho mejor...
pedrito por primero gracias por todo por su sabiduria y todo u por segundo la lecturas esta buena nos enseña que simnifica la lengua en nuestro castellano
la economia o ahoro es el sistema de plata de nuestro pais nuestra economia sobre el peso...
nuestra lengua se a enriquesido porque ay gente que llega y crea palabras nuevas y que no existen y asi se sigue disiendo esa palabra asta que se ase oficial.
hola pedro eres un profe super vacano espero no cambies te quiero mucho
veronica 9a
Es una lectura muy interesante ya que nos enseña muchas cosas para la vida.
Ya que la lengua es un elemento fundamental para la educación y comunicacion con las demas personas.
DANIEL DIAZ:
Pedro Fabio, me parecen muy valiosos y enriquecedores los aportes sobre el proceso comunicativo aquí expuestos, la verdad soy un convencido de la importancia que la comunicación ofrece a los individuos para interactuar de forma acertiva en el conocimiento de la vida, y además del diálogo continuo que fortalece la sana convivencia y la amplitud de nuestra lengua.
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